Estos ovillos de lana me pedían que hiciera algo con ellos desde hacía ya varios meses.
Pero no tuvieron que pedírmelo dos veces, porque la verdad es que lo estaba deseando.
¿No son bonitos?
Me encanta su forma, sus colores. Y lo mejor... ¡son de León!
Y, bueno, no tuve que pensar mucho porque hacía tiempo que por mi cabeza se paseaba...
¡¡Gardenia!!
¡Miradla! ¡Qué avispada y despierta es!
Con esos ojos grandes y redondos que todo lo miran y remiran.
Y esas pestañas extralaaaargas...
Gardenia es blandita y rellenita (de guata).
Y alegre y colorida.
Ella misma ha cosido tres botones en su vestido; porque es presumida y le gustan los pequeños detalles.
¿Y qué me decís de sus botas?
¡Galácticas a más no poder!
Apenas lleva un par de semanas en casa y ya se ha integrado totalmente con el resto de la panda.
Eso sí, si a alguien le apetece adoptarla, ella está dispuesta a irse inmediatamente con quien quiera darle mimos y cariño.